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Trufas

La trufa negra (Tuber melanosporum) es un hongo que forma una asociación simbiótica con determinadas especies de árboles hospederos, principalmente encinas, roble europeo y avellanos.

La síntesis de la relación simbiótica entre la trufa y sus hospederos, bajo condiciones controladas, a fines de los 70, es considerado el avance más importante en el desarrollo de su cultivo y hoy en día, con los avances en los métodos de inoculación y un apropiado manejo de las plantaciones, la trufa negra puede ser producida rentablemente incluso a una pequeña escala.

La plantación sistemática de árboles micorrizados con el hongo Tuber melanosporum, ha sido exitosa en la producción de trufas. Las investigaciones han demostrado que existen varias especies hospederas de T. melanosporum, sin embargo Quercus sp. (robles y encinos) y Corylus sp (avellanos) son los preferidos para el cultivo del hongo. Bajo condiciones óptimas, la producción puede comenzar después de cuatro a cinco años del establecimiento, sin embargo, para efectos de evaluación se recomienda considerar el inicio productivo a partir del año 6, lográndose la máxima producción alrededor del año 10/11, en donde se ameseta la producción durante muchísimos años.

A partir del inicio productivo de la plantación, la cosecha de trufa es anual y sostenida durante 30 a 40 años o más. En las plantaciones europeas los rendimientos presentan gran variabilidad, dependiendo de las condiciones de sitio, calidad de las plantas y los métodos de manejo usados. En Europa existen plantaciones con producciones regulares y constantes próximas a 100 kg/ha/año y por el contrario otras que apenas superan los 10 kg/ha/año. De acuerdo a las experiencias en Nueva Zelanda y Australia, los rendimientos

iniciales de una plantación serán de 2 a 4 Kg por hectárea, de acuerdo a nuestra consideraciones y experiencias en Chile, las primeras producciones oscilaran entre 400 gr a 600 gr  aumentando anualmente para llegar a 40 Kg por hectárea promedio en plena producción, estimándose esta última entre el 10° al 11°º año. Cabe destacar que también hay plantaciones en países como Nueva Zelanda con rendimientos superiores a los 90 Kg por hectárea, los cuales se encuentran entre los más altos productores a nivel mundial.